LOS OJOS HACEN MÁS QUE VER

16.09.2020

Isaac Asimov, nació en Rusia, pero a los tres años viajó a Estados Unidos con su familia, donde se formó y estudió hasta transformarse en doctor en bioquímica being muy joven. Interesado por la historia, las religiones, la ciencia ficción y la ciencia, el autor publicó más de 500 obras.

Hijo de Judah Asimov y Anna Rachel Berman, el pequeño Isaac recibió el nombre de su abuelo materno el 2 de enero de 1920, cuando nació en Petróvichi, un pueblo de Rusia a 400 kilómetros de Moscú. Aunque nunca habló ruso, Isaak Yúcovich Asímov vivió hasta los tres años en la entonces República Socialista Federativa Soviética, para luego emigrar con sus padres a Norte América. Allí comenzó a firmar como Isaac Asimov; fue ciudadano estadounidense desde 1928.

Prodigio desde la cuna, su madre cambió la fecha de nacimiento de su primogénito, que ya había aprendido a leer de manera autodidacta, para que Isaac comenzara su educación formal antes de lo que permitía la ley. De esta forma, con la fecha falsa del 4 de octubre de 1919 como su primer cumpleaños, comenzó la etapa primaria a los 5 años, en la escuela pública de Nueva York, en el año 1925.

Siguió sus estudios por East New York Junior High School, hasta junio de 1930, logrando entrar luego a la Boys High School con solo 10 años. Se graduó en 1935, a los 15, misma edad en la que entró en la Universidad de Columbia para obtener el título de bioquímico en 1939. Tenía 19 años.

Pero antes de transformarse en licenciado, a los 9, Isaac trabajó en los kioscos del padre y se volvió fanático de las historietas. Las "pulp", populares, de bajo costo y adictivas. Estas obras acercaron al pequeño Asimov a la ficción ya la escritura, oficio que arrancó a los 14 años con su primer cuento y que nunca abandonó. Además de ser un divulgador científico, Asimov fue un prolífico escritor hasta el final de sus días. Nunca dejó de estudiar.

En 1941 obtuvo el postgrado en química, y en 1948 el doctorado, título que le abrió las puertas de la Universidad de Boston para desempeñarse por diez años como ayudante de cátedra. En el medio, trabajó en Filadelfia como investigador químico en los astilleros de la marina estadounidense, y desarrollando ese puesto fue testigo de la Segunda Guerra Mundial.

Cuando dejó el empleo en la universidad descubrió que su labor como escritor de ciencia ficción le proporcionaba los ingresos suficientes para dedicarse de lleno a otra de sus pasiones: la escritura.

Acaso una de las mejores virtudes que tuvo Asimov como escritor haya sido más su talento para narrar la historia universal que él mismo inventaba. Como ningún otro, y con un conocimiento basado en un programa autodidacta creado por él (nunca dejó de estudiar), Isaac dedicó también varios años de su vida a contar qué pasó en el pasado.

A pesar de considerar ateo en materia de religión, el autor no le escapó a estos temas. Entre el año 1967 y 1969 escribió dos volúmenes para leer y comprender el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento, explicando los distintos contextos históricos en que fueron escritos y las posibles influencias políticas del momento. (cultura.gob.ar)

A partir de los 14 años


¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar